Primero hemos tenido que abrir el queso y el jamón de york... ¡Cada vez lo hacemos mejor!
Después, hemos untado el queso en el filete de jamón... Quedando así...
Hemos tenido que abrir las nueces... Esto nos ha costado un poquito más... pero, ¡prueba superada!
Y las hemos convertido en trocitos pequeños, algunos,... ¡no tan pequeños!
Sólo queda echar los trocitos de nueces encima del queso y...
... hacer un rollito con el jamón.
Y a pesar de que el aspecto no era muy apetecible,
y a pesar de que las mezclas de sabores no nos gustan mucho...
Salta a la vista que... ¡nos hemos puesto las botas!
Priermo
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